Los días pasaron, los resultados ya estaban listos,
Lucero y Fernando fueron juntos a recogerlos, Los nervios se notaban en ambos.
La recepcionista los observó y sonrió, parecía como si fuera la primera vez que
fueran a conocer si estaban esperando un bebé.
- Aquí están los resultados.
- Cómo y el médico no está?
- No señora salió a un viaje, pero este fue el resultado que más me encargó Para entregar
- Muchas Gracias Señorita… Cielo lo abres tu o lo abro yo?
- Ven, yo lo hago. Listo, cierra los ojos.
- Noooo.
- Hazlo.
- Está Bien.
- Unoooo Doooos yyyy Treeees!!!!
- Qué diceeee??
- Dale un beso al papá de Tres Hermosos Regalos.
- Qué? Mi Cielooooo!!!
- Siiii Bonita, Siiiiii- Lucero abrazó con fuerza a Fernando, él la alzó de la emoción.
- Te amo, Te Amo, Te Amo Mi Cielo.
- Y Yo a Ti, Gracias por esta Felicidad, Bonita, Mi Bonita.
- Aquí están los resultados.
- Cómo y el médico no está?
- No señora salió a un viaje, pero este fue el resultado que más me encargó Para entregar
- Muchas Gracias Señorita… Cielo lo abres tu o lo abro yo?
- Ven, yo lo hago. Listo, cierra los ojos.
- Noooo.
- Hazlo.
- Está Bien.
- Unoooo Doooos yyyy Treeees!!!!
- Qué diceeee??
- Dale un beso al papá de Tres Hermosos Regalos.
- Qué? Mi Cielooooo!!!
- Siiii Bonita, Siiiiii- Lucero abrazó con fuerza a Fernando, él la alzó de la emoción.
- Te amo, Te Amo, Te Amo Mi Cielo.
- Y Yo a Ti, Gracias por esta Felicidad, Bonita, Mi Bonita.
Manuel y Sofía fueron a casa de los Colunga Hogaza,
Ofelia estaba con los Niños y con Margarita.
- Buenas Tardes.
- Manuel!!! Sofía!!! Pasen.- les abre Ofelia.
- Lucero o Fernando, está?
- No, ellos fueron al médico.
- Siguió mal Lucero?
- Nooo, es que…- Margarita se puso de pie e interrumpe.
- Examenes de Rutina.
- Aaaah entiendo, será que demoran?
- Creo que sí.
- Gracias, entonces volvemos luego o los llamamos.
- Si Manuel les diremos que estuvieron aquí.- Manuel y Sofía se marcharon, Ofelia se acerca a Margarita:
- Por qué no les dijo el porqué de la cita de mi niña?
- Ofelia, porque aún no sabemos si si es un embarazo.
- Si tiene razón.
- Buenas Tardes.
- Manuel!!! Sofía!!! Pasen.- les abre Ofelia.
- Lucero o Fernando, está?
- No, ellos fueron al médico.
- Siguió mal Lucero?
- Nooo, es que…- Margarita se puso de pie e interrumpe.
- Examenes de Rutina.
- Aaaah entiendo, será que demoran?
- Creo que sí.
- Gracias, entonces volvemos luego o los llamamos.
- Si Manuel les diremos que estuvieron aquí.- Manuel y Sofía se marcharon, Ofelia se acerca a Margarita:
- Por qué no les dijo el porqué de la cita de mi niña?
- Ofelia, porque aún no sabemos si si es un embarazo.
- Si tiene razón.
- Bonita, Sabes a dónde quiero ir en este momento?
- A Dónde?
- Quiero ir a agradecerle a Dios porque una vez más nos da la oportunidad de ser padres.
- Me encanta esa idea.Llegaron a una hermosa capilla, ambos se arrodillaron y comenzaron a darle las gracias a Dios, Lucero cerró sus ojos, cuando Fernando volteó a verla unas cuantas lágrimas rodaban en sus mejillas. Susurrando se le acerca:
- A Dónde?
- Quiero ir a agradecerle a Dios porque una vez más nos da la oportunidad de ser padres.
- Me encanta esa idea.Llegaron a una hermosa capilla, ambos se arrodillaron y comenzaron a darle las gracias a Dios, Lucero cerró sus ojos, cuando Fernando volteó a verla unas cuantas lágrimas rodaban en sus mejillas. Susurrando se le acerca:
- Me imagino que son de alegría.
- Te lo imaginas Bien, son de alegría y agradecimiento.
- Te lo imaginas Bien, son de alegría y agradecimiento.
Al llegar a su casa, Ofelia, Margarita y Don Antonio los
esperaban.
- Papá!!! Suegra!! Qué hacen aquí?
- Hija, es que Ofelia nos dijo que habías estado con el doctor, y pues queremos saber si si o si no.
- Si si o si no, qué?
- No Te Hagas Mi Niña…
- Siiiiiiii!!!!!!- Margarita y Ofelia corrieron a abrazarlos y Felicitarlos. Don Antonio sonrio pero bajó su rostro.- Papá y a ti no te alegra la noticia?
- Claro que si dulzura, es un nuevo integrante, eso me hace muy feliz.
- Entonces por qué estás así?
- Puedo hablar contigo?
- Si Ven vamos al cuarto de los Niños.
En el cuarto…
- Ya sabes cuánto tienes?
- No Aun no, pero según mis cálculos algo más del mes… Qué pasa Papá?
- Me preocupo por tu salud.
- Pero estoy bien.
- Hija no olvides cómo han sido tus embarazos.
-No Papá, no lo olvido, Papá que me tienes qué decir?
- Hija, nunca te conté el porqué la muerte de tu madre.
- Y a que viene eso?
- Para que estés prevenida, no quiero que te pase lo mismo.
- Cómo que lo mismo? Ay Papá! De qué me estás hablando?
Don Antonio respiró profundo – Hija, tu madre estaba embarazada, cuando nos enteramos ella tenía 3 meses de embarazo confirmados, su salud comenzó a decaer, logramos estabilizarla hasta los seis meses de embarazo, una recaída fuerte hizo que la lleváramos a la clínica, ahí su doctor me dijo que tenía que decidirme entre salvarle la vida al bebé o a tu madre.
- Espera, espera, Por qué nunca me contaste esto?
- Un día que te lo iba a contar, me dijiste que no querías saber el porqué de su muerte.
- Papá eso te lo dije cuando tenía 10 años!!!
- Nunca me volviste a tocar el tema, pensé que no lo volverías a hacer.
- Pero yo no te toqué el tema, por qué contarlo?
- Porque no quiero qué nada malo les pase a ti o a mi nieto.
- Bueno, pero y…
- Yo entré y tu madre se veía muy mal, con su voz débil logró decirme: “Si es niño se llamará Antonio, como tú.”, esas palabras aún las recuerdo muy bien. Al salir de ahí le dije al doctor que hiciera todo lo posible por salvarlos a los dos, las horas transcurrieron, a tu madre y a tu hermano no los volví a ver si no hasta cuando... realmente no volví a ver sus ojos abiertos.- Lucero no parpadeaba, las lágrimas salían solas- Hija por eso te pido que sigas cada una de las instrucciones del doctor.
- Espera papá! Mi Madre murió en un parto?
- Si hija, el bebé se adelantó. – Lucero Con Voz fuerte le reclama:
- Y Por qué vienes a contarme esto precisamente cuando me entero que estoy embarazada, cuando la felicidad inunda mi vida aún mas?
- Perdóname Hija, es que el miedo de perderte a ti o a mi nieto.
- Está Bien, (ya más calmada) solo te voy a pedir un favor, que Fernando no sepa de esto, no quiero que él se asuste, te prometo que voy a seguir cada indicación del médico.
- OK Hija, Fernando no lo sabrá.
- Papá!!!
- Si?
- Fue Niño o niña?
- Por eso en su Tumba dice: “Gracias por tanta Alegría Mi Antonio”
- Fue Niño.
- Ajá. – Lucero lo abrazó y le dio un cálido beso en la frente.
- Papá!!! Suegra!! Qué hacen aquí?
- Hija, es que Ofelia nos dijo que habías estado con el doctor, y pues queremos saber si si o si no.
- Si si o si no, qué?
- No Te Hagas Mi Niña…
- Siiiiiiii!!!!!!- Margarita y Ofelia corrieron a abrazarlos y Felicitarlos. Don Antonio sonrio pero bajó su rostro.- Papá y a ti no te alegra la noticia?
- Claro que si dulzura, es un nuevo integrante, eso me hace muy feliz.
- Entonces por qué estás así?
- Puedo hablar contigo?
- Si Ven vamos al cuarto de los Niños.
En el cuarto…
- Ya sabes cuánto tienes?
- No Aun no, pero según mis cálculos algo más del mes… Qué pasa Papá?
- Me preocupo por tu salud.
- Pero estoy bien.
- Hija no olvides cómo han sido tus embarazos.
-No Papá, no lo olvido, Papá que me tienes qué decir?
- Hija, nunca te conté el porqué la muerte de tu madre.
- Y a que viene eso?
- Para que estés prevenida, no quiero que te pase lo mismo.
- Cómo que lo mismo? Ay Papá! De qué me estás hablando?
Don Antonio respiró profundo – Hija, tu madre estaba embarazada, cuando nos enteramos ella tenía 3 meses de embarazo confirmados, su salud comenzó a decaer, logramos estabilizarla hasta los seis meses de embarazo, una recaída fuerte hizo que la lleváramos a la clínica, ahí su doctor me dijo que tenía que decidirme entre salvarle la vida al bebé o a tu madre.
- Espera, espera, Por qué nunca me contaste esto?
- Un día que te lo iba a contar, me dijiste que no querías saber el porqué de su muerte.
- Papá eso te lo dije cuando tenía 10 años!!!
- Nunca me volviste a tocar el tema, pensé que no lo volverías a hacer.
- Pero yo no te toqué el tema, por qué contarlo?
- Porque no quiero qué nada malo les pase a ti o a mi nieto.
- Bueno, pero y…
- Yo entré y tu madre se veía muy mal, con su voz débil logró decirme: “Si es niño se llamará Antonio, como tú.”, esas palabras aún las recuerdo muy bien. Al salir de ahí le dije al doctor que hiciera todo lo posible por salvarlos a los dos, las horas transcurrieron, a tu madre y a tu hermano no los volví a ver si no hasta cuando... realmente no volví a ver sus ojos abiertos.- Lucero no parpadeaba, las lágrimas salían solas- Hija por eso te pido que sigas cada una de las instrucciones del doctor.
- Espera papá! Mi Madre murió en un parto?
- Si hija, el bebé se adelantó. – Lucero Con Voz fuerte le reclama:
- Y Por qué vienes a contarme esto precisamente cuando me entero que estoy embarazada, cuando la felicidad inunda mi vida aún mas?
- Perdóname Hija, es que el miedo de perderte a ti o a mi nieto.
- Está Bien, (ya más calmada) solo te voy a pedir un favor, que Fernando no sepa de esto, no quiero que él se asuste, te prometo que voy a seguir cada indicación del médico.
- OK Hija, Fernando no lo sabrá.
- Papá!!!
- Si?
- Fue Niño o niña?
- Por eso en su Tumba dice: “Gracias por tanta Alegría Mi Antonio”
- Fue Niño.
- Ajá. – Lucero lo abrazó y le dio un cálido beso en la frente.
-Hijo y cuanto tiene Lucero?
- Pues aún no es seguro pero es algo más de un mes.
- Está super pequeño.
- Si Mamá. Qué tanto hablarán mi Suegro y Lu?
- Tranquilo Hijo, Luego ella te contara.
- Si tienes Razón. – Ellos salen, José Miguel venía con ellos, corrió a los brazos de su papá, a Rafael lo traía cargado su Abuelo. – Campeón!!!
- Creo que hay a alguien a quien les falta darle la noticia.- Sonrió Ofelia.
- Tienes Razón Nana.- Lucero se sentó al lado de Fernando junto al pequeño José Miguel.- Príncipe te tengo una noticia.
- Me van a dar un nuevo juguete?
- Jajajaja No.
- Qué es?
- Es algo o mejor dicho alguien que te hará muy feliz, y con quien podrás jugar mucho.
- Rafa juega mucho conmigo.
- Si Campeón, pero Tu Mami se refiere a alguien más.
- Quién?
- Campeón, Rafael es tu Hermanito, ahora vas a tener un nuevo hermanito o hermanita para jugar.
- y tengo que prestarle mis juguetes?- Todos se rieron.
- Si Mi Principe, pero eso será cuando ya él o ella pueda jugar, contigo y con Rafael.
- Y dónde lo vas a acostar? En mi cuna no cabe!
la Explicación con José Miguel básicamente era de ocurrencias, inocencia y ternura, así pasaron la tarde, al llegar la noche los niños ya dormían, Margarita y Antonio se fueron cada uno para su respectiva casa y Ofelia a su cuarto, Lucero entró a la ducha y Fernando acomodaba la cama:
- Bonita!!!
- Dime Cielo.
- De qué platicabas con tu Papá?- Lucero saló enrollada en su toalla y secando su cabello.
- Resumidamente me dijo que siguiera cada instrucción del doctor y qué se sentía muy Feliz al saber la noticia.
- Pensé que era algo malo.
- Nooo, no mi cielo no te preocupes, todo está bien.
- Bonita.
- Si?
- Te ves Tan Hermosa así.
- Así como?
- Así desnuda, colocándote tu pijama frente a mí.
- Jajajajaja, pues grábate bien este cuerpo, porque dentro de poco comenzará a cambiar.
- Pero será un Cambio Hermoso.
- Pues aún no es seguro pero es algo más de un mes.
- Está super pequeño.
- Si Mamá. Qué tanto hablarán mi Suegro y Lu?
- Tranquilo Hijo, Luego ella te contara.
- Si tienes Razón. – Ellos salen, José Miguel venía con ellos, corrió a los brazos de su papá, a Rafael lo traía cargado su Abuelo. – Campeón!!!
- Creo que hay a alguien a quien les falta darle la noticia.- Sonrió Ofelia.
- Tienes Razón Nana.- Lucero se sentó al lado de Fernando junto al pequeño José Miguel.- Príncipe te tengo una noticia.
- Me van a dar un nuevo juguete?
- Jajajaja No.
- Qué es?
- Es algo o mejor dicho alguien que te hará muy feliz, y con quien podrás jugar mucho.
- Rafa juega mucho conmigo.
- Si Campeón, pero Tu Mami se refiere a alguien más.
- Quién?
- Campeón, Rafael es tu Hermanito, ahora vas a tener un nuevo hermanito o hermanita para jugar.
- y tengo que prestarle mis juguetes?- Todos se rieron.
- Si Mi Principe, pero eso será cuando ya él o ella pueda jugar, contigo y con Rafael.
- Y dónde lo vas a acostar? En mi cuna no cabe!
la Explicación con José Miguel básicamente era de ocurrencias, inocencia y ternura, así pasaron la tarde, al llegar la noche los niños ya dormían, Margarita y Antonio se fueron cada uno para su respectiva casa y Ofelia a su cuarto, Lucero entró a la ducha y Fernando acomodaba la cama:
- Bonita!!!
- Dime Cielo.
- De qué platicabas con tu Papá?- Lucero saló enrollada en su toalla y secando su cabello.
- Resumidamente me dijo que siguiera cada instrucción del doctor y qué se sentía muy Feliz al saber la noticia.
- Pensé que era algo malo.
- Nooo, no mi cielo no te preocupes, todo está bien.
- Bonita.
- Si?
- Te ves Tan Hermosa así.
- Así como?
- Así desnuda, colocándote tu pijama frente a mí.
- Jajajajaja, pues grábate bien este cuerpo, porque dentro de poco comenzará a cambiar.
- Pero será un Cambio Hermoso.
Los meses Pasaron, Lucero asistía a su control
puntualmente junto a Fernando, el bebé mostraba estar sano, ella se presentaba
de vez en cuando a la oficina, él si cumplía sus horarios de trabajo y a sus
clases de la Universidad, Ofelia cuidaba de los niños y Margarita de vez en
cuando le ayudaba. Manuel y Sofía hablaron con Fernando y Lucero, los cuales
aceptaron ser los testigos de su Matrimonio Civil, este se llevó a cabo en una
ceremonia íntima; los días trascurrían, en Lucero eran notables su 5 meses de
embarazo, Rafael cumplió su primer añito de edad y José Miguel sus Tres. El
horario de trabajo de Fernando se hizo extenso, había noches en que Lucero se
quedaba dormida esperando que él llegara. Llegó el día de ir de nuevo al ginecólogo,
quedaron en que Fernando llegaría allá, Lucero lo esperaría, la hora llegó,
Ella en la sala de espera, timbraba una y otra vez a su esposo:
- Bonita, ya casi salgo, espérame unos minutos.
- Está bien, MI Cielo.
Pasados 20 minutos, Lucero de nuevo le timbra:
- Mi Cielo ya voy a entrar, ya me han anunciado dos veces.
- Espérame, me zafo de una reunión y salgo para allá.
- Señora debe pasar, ya el doctor la está esperando.
- Pero es que mi esposo aun no llega.
- La entiendo, pero esta es el último llamado, o si no se dará por perdida su cita.
- No Señorita Tranquila, ya entro.
- Bonita, ya casi salgo, espérame unos minutos.
- Está bien, MI Cielo.
Pasados 20 minutos, Lucero de nuevo le timbra:
- Mi Cielo ya voy a entrar, ya me han anunciado dos veces.
- Espérame, me zafo de una reunión y salgo para allá.
- Señora debe pasar, ya el doctor la está esperando.
- Pero es que mi esposo aun no llega.
- La entiendo, pero esta es el último llamado, o si no se dará por perdida su cita.
- No Señorita Tranquila, ya entro.
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