Él se interpone entre Fernando y Alonso, Cae lentamente
con un disparo en el pecho, los hombres que acompañaban a Mauricio llegaron y
lograron atrapar a Alonso que quedó perplejo después de haber disparado, Lucero
se acerca mientras Fernando recuesta la Cabeza de Mauricio en sus piernas.
- Creo que logramos atraparlo Fernando.
- No Hables Mauricio, Todo va estar Bien.
- Perdón por no cuidar bien de su esposa.
- Mira cómo estás, me salvaste la vida y Lucero también está a salvo.
- Fernando Puedo Decirle algo a su Esposa? – Fernando asintió y Lucero se acercó llorando…
- Lucero, *Cof* *Cof* puedo pedirle un favor?
- Mauricio no hables mucho…
- Puedo?
- Fer, debemos ir por ayuda…
- Ya los Hombres fueron, allá vienen otros…- Mauricio tomo la mano de Lucero y la puso en su corazón
-Lucero escúcheme…
- Dime Mauricio
- Este latido que aún se logra sentir, se enamoró de usted.
- Mauricio por favor no hables más…
- Déjeme Lucero, déjeme decirle todo esto que callé por tanto tiempo.- Lucero puso su otra mano en el pecho de Mauricio, las lágrimas recorrían sus mejillas y caían al rostro de su guardaespaldas, Fernando sólo observaba la situación pero esta vez no sentía celos- Déjeme decirle que me enamoré de la Gran Mujer que usted es, Fernando es el más afortunado al tener una esposa tan linda.
- Mauricio, vas a estar bien, por eso debes mantenerte en silencio, no demora en llegar ayuda.
-Lucero no me quiero morir sin sentir sus labios sobre los míos- Lucero levantó el rostro y miró a Fernando, sus ojos también estaban empañados de lágrimas, Ella no sabía qué hacer, Fernando le sonrió y con su mirada le dio la aprobación para besar a Mauricio. Ella lo besó, un beso sencillo, suave y delicado.- Saben a miel.- Dijo saboreando sus labios.
- Ya deja de Hablar, por favor.
- Ya me puedo morir tranquilo.
- Nooooo, Feeeer ayudaloooo.- Fernando trató de alzarlo.
- No, no, tranquilos – La Sangre comenzó a notarse en la boca de Mauricio y casi sin fuerzas asegura- Heridas como esta son mortales.
- Lucha, Lucha por tu vida- Suplicaba Lucero cubriendo la herida.
- Fernando, Cuídela; Gracias Lucero por permitirme morir enamorado.-Sonrió y Murió.
- Nooooo, No Mauricio, esto es mi culpaaaaaa, Fer haz que abra los ojos. Feeer no lo dejes morir.
- Bonita, mi Bonita ven. – Fernando acomodó la cabeza de Mauricio, abrazó a Lucero quien lloraba como una niña en el pecho de Fernando.
- Mauricio!!! Nooooo!!! Todo es mi Culpa…- Lucero abraza a Mauricio, sin consuelo llora sobre su cuerpo; llegan los demás hombres, Fernando se levanta y les muestra la casa donde habían estado cautivos:
- Allá hay una mujer herida.- Lucero al escuchar eso se sorprende…
- Qué!!!???
- Rebeca salió herida.- Un grupo de hombres corrieron a la casa, otros levantaban el cuerpo de Mauricio.
- Fer, a qué horas sucedió todo esto?
- No Lo sé Mi Bonita. Solo sé que estas a mi lado y eso me llena de fortaleza.
- Quiero ver a mi hijos ya, quiero dormir y pensar que todo fue una pesadilla…
- Ay Lucero pero…
- Si ya sé, Mi Cielo, esto es real.- Fernando la abrazó, la debilidad de su cuerpo era notoria, él la cargó y la llevó en los brazos hasta donde se encontraba una camioneta.
- Creo que logramos atraparlo Fernando.
- No Hables Mauricio, Todo va estar Bien.
- Perdón por no cuidar bien de su esposa.
- Mira cómo estás, me salvaste la vida y Lucero también está a salvo.
- Fernando Puedo Decirle algo a su Esposa? – Fernando asintió y Lucero se acercó llorando…
- Lucero, *Cof* *Cof* puedo pedirle un favor?
- Mauricio no hables mucho…
- Puedo?
- Fer, debemos ir por ayuda…
- Ya los Hombres fueron, allá vienen otros…- Mauricio tomo la mano de Lucero y la puso en su corazón
-Lucero escúcheme…
- Dime Mauricio
- Este latido que aún se logra sentir, se enamoró de usted.
- Mauricio por favor no hables más…
- Déjeme Lucero, déjeme decirle todo esto que callé por tanto tiempo.- Lucero puso su otra mano en el pecho de Mauricio, las lágrimas recorrían sus mejillas y caían al rostro de su guardaespaldas, Fernando sólo observaba la situación pero esta vez no sentía celos- Déjeme decirle que me enamoré de la Gran Mujer que usted es, Fernando es el más afortunado al tener una esposa tan linda.
- Mauricio, vas a estar bien, por eso debes mantenerte en silencio, no demora en llegar ayuda.
-Lucero no me quiero morir sin sentir sus labios sobre los míos- Lucero levantó el rostro y miró a Fernando, sus ojos también estaban empañados de lágrimas, Ella no sabía qué hacer, Fernando le sonrió y con su mirada le dio la aprobación para besar a Mauricio. Ella lo besó, un beso sencillo, suave y delicado.- Saben a miel.- Dijo saboreando sus labios.
- Ya deja de Hablar, por favor.
- Ya me puedo morir tranquilo.
- Nooooo, Feeeer ayudaloooo.- Fernando trató de alzarlo.
- No, no, tranquilos – La Sangre comenzó a notarse en la boca de Mauricio y casi sin fuerzas asegura- Heridas como esta son mortales.
- Lucha, Lucha por tu vida- Suplicaba Lucero cubriendo la herida.
- Fernando, Cuídela; Gracias Lucero por permitirme morir enamorado.-Sonrió y Murió.
- Nooooo, No Mauricio, esto es mi culpaaaaaa, Fer haz que abra los ojos. Feeer no lo dejes morir.
- Bonita, mi Bonita ven. – Fernando acomodó la cabeza de Mauricio, abrazó a Lucero quien lloraba como una niña en el pecho de Fernando.
- Mauricio!!! Nooooo!!! Todo es mi Culpa…- Lucero abraza a Mauricio, sin consuelo llora sobre su cuerpo; llegan los demás hombres, Fernando se levanta y les muestra la casa donde habían estado cautivos:
- Allá hay una mujer herida.- Lucero al escuchar eso se sorprende…
- Qué!!!???
- Rebeca salió herida.- Un grupo de hombres corrieron a la casa, otros levantaban el cuerpo de Mauricio.
- Fer, a qué horas sucedió todo esto?
- No Lo sé Mi Bonita. Solo sé que estas a mi lado y eso me llena de fortaleza.
- Quiero ver a mi hijos ya, quiero dormir y pensar que todo fue una pesadilla…
- Ay Lucero pero…
- Si ya sé, Mi Cielo, esto es real.- Fernando la abrazó, la debilidad de su cuerpo era notoria, él la cargó y la llevó en los brazos hasta donde se encontraba una camioneta.
Los hombres encontraron rastros de sangre por la sala de
la casa, Rebeca no estaba donde Fernando había dicho. A las afueras, Ellos
inspeccionaron, notaron huellas de las llantas de una camioneta.
- Corran se nos escapó la mujer, ustedes busquen por allá y ustedes por aquí!!!
- Corran se nos escapó la mujer, ustedes busquen por allá y ustedes por aquí!!!
Manuel se enteró de lo sucedido y se dirigió hasta la
Hacienda, allí se encontró con Antonio quien llegaba de inspeccionar una parte
del lugar, él le comentó que era lo que estaba sucediendo:
- Y las autoridades no saben nada Antonio?
- Si ya dimos aviso a la capital, ya vienen en camino.
al entrar a la casa vieron a Silvia y a Margarita en la sala, todo era muy confuso:
- Qué hace ella aquí?
- Trajo a los niños?
- A mis nietos?
- Si…
- y Lucero? Dónde están Lucero y Fernando?
- Señor yo le puedo explicar pero por favor déjeme hablar sin juzgarme.
- Qué pasó con Mi Hija?Silvia, al igual que lo había hecho con Margarita, le explicó a Antonio cómo habían sucedido las cosas.
- Y las autoridades no saben nada Antonio?
- Si ya dimos aviso a la capital, ya vienen en camino.
al entrar a la casa vieron a Silvia y a Margarita en la sala, todo era muy confuso:
- Qué hace ella aquí?
- Trajo a los niños?
- A mis nietos?
- Si…
- y Lucero? Dónde están Lucero y Fernando?
- Señor yo le puedo explicar pero por favor déjeme hablar sin juzgarme.
- Qué pasó con Mi Hija?Silvia, al igual que lo había hecho con Margarita, le explicó a Antonio cómo habían sucedido las cosas.
Fernando llega apresurado con Lucero en brazos:
- Hijo!!! Qué le pasó a Lucero?
- Mamá acomoda la alcoba principal, Lucero está débil.
- Fernando dime que mi hija está bien.
- Lo estará si actuamos rápido. La Fiebre está aumentando.
- Iré por un médico- Interviene Manuel.
- Manuel qué haces aquí?... Bueno ve por favor urgente.
- Hijo!!! Qué le pasó a Lucero?
- Mamá acomoda la alcoba principal, Lucero está débil.
- Fernando dime que mi hija está bien.
- Lo estará si actuamos rápido. La Fiebre está aumentando.
- Iré por un médico- Interviene Manuel.
- Manuel qué haces aquí?... Bueno ve por favor urgente.
Todos subieron y acomodaron a Lucero en la cama, Margarita y Fernando la
desvistieron, quitándole aquella sucia pijama y le pusieron una limpia.
- y tu hijo, estas bien?
- Lo estaré cuando vea que Lucero está consciente; Mamá y mis hijos?
- Están en su cuarto.
- Ahora voy con ellos.
- Está bien hijo, voy por agua caliente ya vengo.
Fernando observaba a Lucero, su rostro estaba pálido y sus labios maltratados. Él estaba arrodillado junto a la cama, le acariciaba el cabello a su bonita:
- Mi Amor debes ser fuerte; hemos salido de muchas juntos; Yo sé que tú puedes, hazlo por Jos y por Rafa… Te Acuerdas cuándo nos conocimos?, Cuándo nos besamos en la Biblioteca de la Universidad? O cuándo íbamos al Hotel?... Bonita, No te me vayas, debes ser fuerte, Hay muchas cosas qué aún nos quedan por vivir junto a nuestros Hijos.
- y tu hijo, estas bien?
- Lo estaré cuando vea que Lucero está consciente; Mamá y mis hijos?
- Están en su cuarto.
- Ahora voy con ellos.
- Está bien hijo, voy por agua caliente ya vengo.
Fernando observaba a Lucero, su rostro estaba pálido y sus labios maltratados. Él estaba arrodillado junto a la cama, le acariciaba el cabello a su bonita:
- Mi Amor debes ser fuerte; hemos salido de muchas juntos; Yo sé que tú puedes, hazlo por Jos y por Rafa… Te Acuerdas cuándo nos conocimos?, Cuándo nos besamos en la Biblioteca de la Universidad? O cuándo íbamos al Hotel?... Bonita, No te me vayas, debes ser fuerte, Hay muchas cosas qué aún nos quedan por vivir junto a nuestros Hijos.
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