Capítulo 8

Así pasaron 2 semanas, las miradas se cruzaban en clase, de vez en cuando se veían en la  oficina de Lucero solo charlaban y se conocían, pero Lucero no le comento a Fernando lo sucedido con Manuel…

Llego el Día del Contador, Fernando quería Impresionar a Lucero, por eso le pidió el favor a su tío y le prestara su hacienda, él la invito con un mensaje de texto que decía:

“Bonita, Mi hermosa Contadora, esta Noche no será Mágica, esta noche será Real tan Real como tu belleza, alista Maleta, te tengo Sorpresa, te recojo a las 4:00 pm… Te Amo”.

Lucero quedo sin palabras, ese día no había ido a la oficina por lo que empaco tan rápido como pudo, Su nana un poco confundida…
-Mi niña te encuentras bien? Para donde viajas?...
-Tranquila nana, voy para un paseo con mis amigas…
-Amigas? Pero Por favor Lucero si hace rato que no haces amigas, desde aquel día…
-Ya nana, tenías que recordarme ese amargo momento, confórmate con saber que esta noche no dormiré aquí, ah y avísale a mi padre, Por favor…

Se pone algo cómodo, una camisilla negra con estampados en letras y uno de sus acostumbrados pantalones negros; Tira su maleta al auto y sale al lugar del encuentro, Fernando ya estaba allí esperándola, guardan el auto y la moto en un parqueadero, ambos suben a la camioneta de la madre de Fernando, llenos de felicidad… Llegan a  las 7:00 pm a la Hacienda, él ayuda a bajar a Lucero y venda sus ojos, ella intrigada sin saber que sucede se deja guiar, ÉL quita la venda frente a un lugar hermoso, un  pasillo lleno de pétalos rojos y velas blancas, al final una mesa con dos copas, una botella de champaña y una deliciosa cena, a un lado de la mesa una piscina también llena de pétalos de rosa…
-¡Dios mío! Es impresionante todo lo que has preparado, Es Hermoso, Gracias Mi Cielo…
-Mi Cielo? Que hermoso se escuchó eso en tu boca… Lucero en ese momento se sonrojo eso lo había dicho sin pensarlo, salió a lo natural, además nunca antes le había puesto un sobrenombre a un Ex Novio, ni siquiera a Manuel…
-Pero por qué te pones así, tranquila se te escucho muy lindo… en ese momento la besa, un beso muy apasionado, ambos se ponen de pie y comienzan a bailar; en ese lugar el clima estaba un poco caluroso lo que hizo que Lucero quisiera entrar a la piscina, decidió irse a poner su traje de baño, al salir, Fernando casi muere de asombro, ese cuerpo era espectacular, esos 30 años no habían marcado diferencia en ella, tenía un cuerpo de una chica de 15, esos eran los pensamientos que recorrían su mente…
-Mi Cielo, que sucede? No me queda bien? Voy y me cambio?...
-No. No te queda bien, te queda asombroso, Eres Hermosa, Muy Hermosa…
Fernando no se quedaba atrás, su cuerpo bien tonificado estaba al descubierto, solo una pantaloneta hacía que luciera sus esculturales piernas.

Comenzaron a jugar, de un momento a otro Lucero salta a la piscina y comienza a nadar con gran fluidez, Fernando la siguió, la abrazo y la besó… La luz de la luna solo mostraba las sombras de dos cuerpos debajo del agua, de repente sale a flote el brasier de Lucero, y en una esquina de la piscina ellos desnudos, abrazados, parecían ser un solo cuerpo, él rodeaba su cuello y su pecho de besos mientras sus manos acariciaban sus piernas… 

Fernando no paraba de besarla, pero ella reacciona de una manera inesperada…
- por favor alcánzame mi traje, te lo ruego.
- pero, Bonita que sucede?
-Nada, No sé qué me sucedió, Por favor salgamos de la piscina…Él ve que Lucero tiene lágrimas a punto de caer…
-Lucero Algo te sucede*dijo Fernando con un tono de preocupación* Mírate vas a llorar, que hice para que te pusieras así?
-Nada mi Cielo, no es tu culpa

Ya se había puesto su traje y el su pantaloneta, salieron de la piscina y ella quiso correr, pero él la abrazó por detrás, sus brazos hacían que Lucero se sintiera Segura, Lucero le pide que vayan al cuarto, quería contarle algo de su pasado…