Capítulo 52:

Lucero se levantó antes que Fernando, acomodó algunos de sus documentos necesarios para la Universidad, luego se dispuso a levantar a Fernando:
-Mi Cielo despierta.
-Ay No, Que Hora es?
-Es Tarde, debo ir a la universidad y si quieres que nos vamos juntos debes levantarte.
-Está Bien. –Fernando quito las sabanas con las que dormía y se levantó, Lucero estaba de espaldas aún en pijama frente a su peinadora, él la abraza y comienza a besar su cuello-Dejamos pendiente algo anoche
-Pero ya es tarde.
-No Importa llamas y te excusas- Lucero voltea y sonríe, él la carga y la sienta sobre la mesa de la peinadora, quita la blusa de la pijama mientras que Lucero acariciaba la espalda de Fernando, ella comienza lentamente a bajar el Boxer de Fernando, pero no lo logra porque en ese instante tocan a la Puerta.- No Abras.
-Puede ser algo Importante.
-No No Lo hagas- y besa su boca de manera que ella no puede hablar, solo responder aquel beso, la pasión continúa pero la puerta sigue sonando:
*-Mi Niña, tu papá manda a decir que si puedes bajes a desayunar con él?.*
-No Contestes Princesa, aaay no.- le decía Fernando al Oido.
-Fernando!!! (le susurró)... Si Nana, ya bajo.
Ofelia se fue y Fernando quiere continuar:
-Ahora si ven aquí.
-Jajajaja Fer.
Él tiene a Lucero en frente con su pecho desnudo, ahora iba por la parte inferior de la pijama, pero la suerte no estaba de su  lado, José Miguel comienza a Llorar.
-Hijo es en serio?
-Jjajaja Obvio que es en serio , Mi Cielo, tiene hambre.
-Pero espera me vas a dejar así?
-Feeeeer…
-Bueno, pero me la debes Bonita; cero y van dos Campeón, la de anoche no se me olvida.
-Jajaja Fer no le digas eso al niño. Mejor ve y te alistas en eso yo le doy pecho a José Miguel.

A los minutos ambos bajaron arreglados con el bebé en brazos.

-Fernando?
-Don Antonio, que pena, cómo amaneció?
-Bien, pensé que te habías ido sin despedirte ayer.
-No Don Antonio, me quede a DOOORMIR con Lucero y mi hijo.
-Jajajaja Tranquilo muchacho no te iba a reprochar nada.

De este modo, todos desayunaron, Fernando le entrega a Ofelia el bebé, se despiden y suben al auto de Fernando:

-Extrañaba a mi chofer.
-Bueno Señora de Colunga, vamos para nuestras actividades diarias, así que abroche su cinturón.

Durante el camino escuchaban música y de vez en cuando se daban unos pequeños besos, al llegar a la Universidad luego de parquear el auto, Fernando como todo un caballero se baja primero y va y abre la puerta de Lucero, la toma de la mano y caminan hacía los salones. Mientras iban por el Pasillo iban tomados de la mano, ella elegante como siempre, vestida de Negro pero con su resplandor único, él  un poco más casual, con un saco gris y una bufanda que le combinaba, Fernando le dice al oído:
-Hoy seré la envidia de muchos aquí.

Lucero suelta una carcajada y continúan. Así fue, cuando ellos pasaban muchos quedaban boquiabiertos tanto al ver a su profesora tan hermosa como al ver a Fernando vivo, pues mucho lo reconocían, y mas sorprendido verlos juntos y de la mano. Fernando acompaña a Lucero hasta la puerta del salón:

-Bonita aquí te dejo, que te vaya bien en tu clase, yo voy para la dirección para ver que puedo hacer.
-Listo mi Cielo, cualquier cosa me llamas.
Se despiden con un tierno beso, al entrar ella al salón todo estabas con su boca y sus ojos abiertos.
-Bueno Muchachos ahora sí Buenos Días, en qué quedamos la clase pasada?

Fernando llega hasta donde el director:
-Fernando!!!
-Señor Esteban, cómo está?
-Sorprendido, Muchacho, Dios mio que bien que estés vivo.
-Gracias, vengo aquí para arreglar lo de mi semestre, deseo continuar con mis estudios.
-Claro, pero debo reunirme con los demás directivos para estudiar tu caso, pero tenlo por seguro que de retomarás tu carrera.
-Esta Bien Me Informa.

Fernando salió de la oficina, mientras esperaba a Lucero, recorrió un poco la universidad, Silvia vió pasar al guapo joven pero nunca se imaginó que podía ser Fernando. El sube hasta el salón donde estaba Lucero, se asoma a la ventana de la puerta y le sonrie, ella guiña el ojo y da por terminada la clase. Salen, de Nuevo tomados de la Mano:
-Cuéntame mi Cielo, como te fue?
-Bien, don Esteban me dijo que me informaba de cualquier novedad, y a ti?
-Pues mira que mis alumnos estuvieron muy curiosos, todos a la expectativa, como si quisieran que les contara algo jajajajaja.
-Jajaja mmm veo, Bonita quieres ir a tomar algo?
-Si Claro.

Fueron y tomaron un refresco, conversaron de la clase de Lucero y de los documentos que necesitaría Fernando de nuevo en la universidad.
-Mi Cielo, debemos irnos, es hora de darle pecho a José Miguel.
-Está Bien, vamos, pero en la tarde quiero que vayamos a ver un Apartamento.
-Como tu digas.

Fernando entró y saludó a su hijo dejó a Lucero en su casa y fue a la suya a recoger un poco más de ropa, en la tarde pasó por Lucero:
-Mi Cielo y donde quieres que compremos el apartamento.
-No se, puede ser uno cerca a la universidad o a tu oficina, vamos y vemos varias opciones, te parece?
-si Claro, está bien.

Recorrieron varios apartamentos, buscaban algo que fuera central, amplio y cómodo para José Miguel, además buscaban un lugar con buena vista.

Manuel va hasta la casa de Lucero:
-Qué haces aquí?
-Vengo a ver a Lucero y a José Miguel.
-Lucero no está y el niño esta dormido.
-Ofelia por favor dime que Fernando no ha entrado aquí?
-Claro que si, ha comido aquí y todo.
-Eso quiere decir que Antonio ya sabe que está vivo?
-Claro que si Manuel.
-Y Cuando Llegó? Lucero cómo se enteró?
-y para que quieres saber?
-Ofelia por favor.
-Esta Bien, Él llegó el día que Lucero se fue para a Hacienda, estuvo aquí conoció a José Miguel y jugó un rato con él, luego se fue para allá a darle la sorpresa a mi niña.- Mientras Ofelia le contaba todo a Manuel, el no sabía que hacer, se le veían los celos, Ofelia le contaba más y más para que él se alejara de una vez por todas.
-Sorpresa?
-Si, él llegó alla de noche, y pues te imaginarás el reencuentro.
-Ofelia, por favor dígame, ellos llegaron cuándo?
-Al otro día, ambos se veían Felices a pesar de la preocupación por la fiebre del bebé.
-Maldita Sea!!!
-Oye, qué te pasa?
-Nada, Nada; eso quiere decir que estuvieron juntos.- Manuel le da la espalda a Ofelia- Gracias, Adiós.
-Que estés bien Manuel.

Manuel se sube en su auto y acelera a gran velocidad, dándole golpes al timón:
-Estuviste de nuevo en sus brazos!!! No!!! No Lucero, Pensé que después de esto serías solo mía, estaba a punto de reconquistarte. Maldito Fernando tenías que reaparecer.
Él llega a su casa, estaba Rebeca en ropa interior en el cuarto:
-Y ahora qué te paso?
-Te Quieres Callar?
-No No Me quiero callar, ahora últimamente llegas y me gritas y así como si nada, a que se debe tu estúpido Juego.

Manuel se acerca a ella y con rabia la besa, Rebeca se sorprende y responde el beso, él la termina de desnudar y ella sin  paciencia desnuda a Manuel, él le hace el amor como un loco.

Fernando y Lucero llegaron a un hermoso apartamento en un Sexto piso de un edificio, con grandes ventanales que daban a la ciudad, tenía cuatro amplios cuartos, un estudio, sus pisos eran una elegante cerámica y todo lo justo que buscaban.
-Mira Lucero aquí, es muy amplia la habitación principal.
-Si, Y las otras también, además la vista es hermosa.
Vendedor: Miren Señores el apartamento es amplio además de ser nuevo, tienen Hijos?
-Si Señor un bebito.-Respodió Lucero.
-A bueno Señora mire que a pesar de tener ventanales grandes, el apartamento es seguro puesto que son vidrios gruesos.
-Me encanta es el Balcón del cuarto Principal- Opina Fernando
-Bueno Señores, dejo que sigan observando el Apartamento, debo ir a otro apartamento, si quieren pueden quedarse un rato más, yo vuelvo dentro de unos 15 minutos si desean esperarme.
-Ok, Tranquilo, yo sigo observando con mi esposa, Gracias.

Fernando detallaba las paredes y lo amplio del apartamento, Lucero se quedó observando la ciudad, mientras llamó a Fernando:
-Fer!!
-Si Dime.
-Este está hermoso.
-Si pienso lo mismo.
-Te Acuerdas que te dije que creía que el Peligro Me Excitaba?
-jajajaja Lucero!!! Y a que viene esa Pregunta?
-Mira el Ventanal, además tengo una deuda pendiente contigo.
-Y es aquí donde la quieres saldar?
-Jajajaja podemos estrenar el Apartamento, no te parece?

Esas palabras llamaron la atención de Fernando, quien la besa y comienza a quitarle lo que llevaba puesto, ella suelta la bufanda de Fernando, y la tira al suelo, pero antes corre hasta la puerta:
-Qué pasa?
-No quiero que nos dañen este momento-Mientras aseguraba echando llave.

La toma de la mano, luego la pone de espaldas a él y comienza a besarle el cuello, cae al piso la ropa negra que llevaba Lucero, la luz del sol entraba por las amplias ventanas, ella da vuelta y le quita el saco gris que llevaba puesto, mientras quita la camiseta que él tenia ella muerde su labio, le encanta ver el dorso desnudo de Fernando. Ella besa su propio dedo índice y lo pasa por los labios de Fernando, él solo cierra los ojos, el dedo de lucero continua por el Pecho, haciendo un camino con curvas, llega hasta la cremallera del pantalón, con suavidad comienza a soltarlo hasta que cae al suelo, ambos en ropa interior.
Ahora es Lucero quien besa el cuello de Fernando, así baja por el pecho, los abdominales y al llegar al borde del Boxer, Alza el rostro y le sonríe a Fernando mientras saborea sus labios, pero sube de nuevo dejando marcado sus besos, estando de frente uno al otro, Fernando la toma del rostro y la besa, de esos besos que dejan sin Respiración, de esos succionantes, él desabrocha el brasier y con delicadeza se lo quita, tirándolo a un lado, luego voltea a Lucero, la pone de espaldas a él, la abraza y así se acercan a una de las ventanas, Lucero estaba aprisionada entre el cuerpo de su amado y aquel vidrio, ventana con vista a la amplia ciudad, en ese momento siente detrás suyo la erección de Fernando, ella asienta las palmas de su mano en el vidrio, y su aliento empaña la ventana, la respiración comienza a agitarse, ella voltea y mira fijamente a los ojos de Fernando, y quita el bóxer y su panty, entre besos caen al suelo. Ella sobre él, su cabello caía en el rostro de Fernando, quien lo masajeaba, luego giran y él es quien ahora está arriba, Fernando se arrodilla, Lucero queda tumbada de espaldas, pero ahorcadas de él, ella se inclina y apoya su cintura y su cola en la rodillas y muslos de él. Fernando no pierde oportunidad y acaricia los senos de Lucero, en esos masajes llega hasta su cintura de donde la toma y la atrae hacia él entrando en ella con gran pasión, Lucero gime fuertemente, desea tomarse de algo arañando el piso, los movimientos de Fernando hacían que Lucero se retorciera de placer, sus gritos se escuchaban como eco en aquel amplio apartamento. Pero aquí no termina aquella aventura, Fernando queda acostado encima de Lucero, pero ella esta vez quiere jugar, aun acostados en el suelo ella alcanza la bufanda de Fernando con la que venda sus ojos y con  una de las tiras del enterizo que ella llevaba amarra sus muñecas:
-Que Haces?
-En la Laguna tu jugaste conmigo, ahora es mi Turno de Jugar contigo.
-jajajaja que vas hacer?
Lucero comenzó a Morder el pecho de Fernando Lentamente, bajó hasta su abdomen, de ahí se regresaba de nuevo, esto hacía que Fernando se enloqueciera de placer, Lucero se acerca y besa los labios de Fernando pero su mano no deja de acariciar el pecho del hombre que la hace feliz, aunque no solo el pecho, comenzó a bajar su mano hasta los muslos y las posaba cerca de la ingle de Fernando:
-Suéltame, yo también quiero acariciarte y mirarte.
-Jajajaja mi dulce venganza.
-Yaaaa, Mi Bonita.
-Esta Bien.
Lucero Suelta a Fernando y destapa sus ojos, el toma su brazos y con fuerza la acuesta en el suelo:
-Eso No Se Hace, me Oyó?
Luego la besa, ella solo sonríe.
-Mi Cielo creo que estuvo bien por hoy.
-No, Quiero besarte mas y mas.- Pero el Citófono suena en ese momento:
*-Señores Colunga puedo subir al apartamento o ya casi bajan?, es que necesito comentarles algo*
-Si Señor, eee puede subir.
En ese instante corren rápidamente a cambiarse, Fernando lo hizo en un 2x3, pero Lucero se estaba demorando más de lo normal, así

que corrió a una de las habitaciones.